
Es conocido la capacidad de diversos factores de influir en el estado de salud de las personas. Entre ellos se destacan los factores biológicos, sociodemográficos y medioambiental, en los cuales no siempre se puede lograr una intervención para la promoción de la salud. El cáncer de hígado, no está ajeno a esta realidad, y lamentablemente el verano es una perfecta ocasión para que se pierda el control de factores biológicos y sociodemográficos relevantes relacionados con el estilo de vida, como los excesos de consumo de alimentos no saludable, la ingestión de alcohol, resistencia a la insulina, sedentarismo, intoxicación por aflatoxinas y otros, suscitando consecuentemente la aparición de nuevos casos y el desarrollo de la enfermedad.
Los últimos estudios informan que los tumores hepáticos representan el quinto cáncer más frecuente a nivel mundial, aumentando su incidencia durante los últimos años. Y si bien, es más frecuente en los hombres, en las mujeres se ha observado un incremento en el número de casos, sobre todo después de los 50 años.